Todavía están a tiempo, nos
quedan días de Carnaval para probar unas ricas tortillitas. Éstas las hizo mi
madre, porque una vez intenté hacerlas yo y me salieron fatal. Miramos varias
recetas y al final hizo una mezcla, intentando también recordar cómo las hacía
su madre, que dice que le salían buenísimas aunque nunca le pidió la receta. En
realidad, dice que deberían salir un poco más gorditas.
Ingredientes: Un par de
panecillos bizcochados, 750 cl de leche, medio vaso de vino tinto, 4 huevos, harina,
azúcar, canela en rama y en polvo, ralladura y corteza de limón y matalahúva.
Preparación:
Poner el pan en un bol, hervir la
leche con la corteza de limón y el palito de canela y verter sobre el bizcocho
de forma que quede bien empapado (si hace falta hervir más leche y añadir).
Añadir el vino, azúcar al gusto, canela en polvo, ralladura de limón y matalahúva.
Batir los huevos e incorporarlos a la mezcla y revolver bien. Ponerle harina
(unas 6 cucharadas) hasta que tenga la consistencia deseada. Y aquí empieza lo
difícil, ir haciendo tortillas hasta dar con la mezcla perfecta, añadiendo más
harina a la masa si las tortillas salen muy líquidas o más leche si se quedan
demasiado secas. Obviamente, se hacen un una sartén pequeña ligeramente untada
en aceite y dándole vueltas hasta que se hagan por los dos lados.
Y para acompañar, miel de caña, de la inglesa que viene en lata, ummm...
¡Ños! Como siempre, "chapeau Gladys!"
ResponderEliminar